Vieiras a la gallega rellenas y gratinadas en el horno
Las vieiras a la gallega rellenas y gratinadas en el horno son un bocado exquisito y una apuesta segura, ya que siempre triunfan entre los comensales. Su elaboración es muy sencilla, y para hacerla más aún, recomendamos comprar las vieiras congeladas así evitarás la parte más laboriosa, que es limpiarlas. Su presentación es tradicional y original a la vez, lo que la convierte en una opción perfecta para cualquier momento del año.
INGREDIENTES
- 4 vieiras.
- 1 cebolla.
- 2 lonchas de jamón serrano.
- 1 cucharada sopera de salsa de tomate o tomate frito.
- 1/2 cucharadita de postre de pimentón dulce.
- Pan rallado, el que necesites para cubrir las vieiras.
- 100 ml de vino blanco.
- Aceite de oliva virgen extra y sal.
PREPARACIÓN
- Abrimos las conchas y limpiamos retirando todo lo que no es la carne de la vieira ni el coral naranja. Eliminamos las membranas que las recubren, las lavamos en agua fría, para que queden bien limpias; y secamos con papel de cocina. Lavamos y secamos también las conchas.
- Picamos el jamón y la cebolla para que quede muy fino. Esto podemos hacerlo con un cuchillo o trituradora, al gusto. Cuanto mayor sean los trozos más protagonismo quitará al sabor de la vieira.
- Echamos en una sartén un poco de aceite y el jamón y dejamos que se cocine durante un par de minutos. Añadimos la cebolla, sin dejar de remover, y el vino blanco. Subimos el fuego, dejando que alcohol se evapore.
- Añadimos el tomate frito, y el pimentón, bajamos la temperatura y removemos durante 5 minutos para que termine de cocinarse el sofrito. Si te gusta el picante es el momento de añadirle una guindilla.
- Retiramos del fuego y añadimos las vieiras, removemos con cuidado con el sofrito y que estén ahí un par de minutos para que vayan mezclándose los sabores.
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Colocamos cada vieira en una concha junto con parte del sofrito, y espolvoreamos una fina capa de pan rallado por encima. Vamos poniéndolas en una bandeja de horno y horneamos durante 12 minutos.
- Al cabo de ese tiempo sube la temperatura de tu horno a 200ºC, dejando que se gratinen hasta que se vean doradas.