hipertensión

Cómo controlar la hipertensión

Sólo en nuestro país se pueden contabilizar más de 11 millones de hipertensos. Una patología que se conoce como ‘la muerte silenciosa’, debido a que no suele mostrar síntomas previos o los que muestra son muy inespecíficos, como pueden ser el dolor de cabeza o la fatiga. Esto dificulta el diagnóstico y pone en peligro nuestro sistema cardiovascular. Así pues, desde Maskom Supermercados queremos hablarte de ello y decirte que la solución pasa por cumplir con un calendario de revisiones que deberá ser más frecuente cuantos más años se vayan cumpliendo. Y es que, aunque la edad es un factor de riesgo muy relevante, no es el único.

La llegada de la menopausia suele estar muy asociada a los problemas de tensión. Por eso, las mujeres deben prestar un extra de atención durante esa época.

Hay que poner especial énfasis en ello, ya que suele ser habitual la aparición de problemas de manera brusca, incluso en mujeres que cuentan con un historial de tensión baja. Así pues, mientras que las mujeres entran en este período de riesgo sobre los 50, los hombres deben comenzar las revisiones antes, a partir de los 40. Y a pesar de que la edad es uno de los principales factores de riesgo, hay otros con mucho peso, aunque la buena noticia es que contra ellos sí se puede luchar. Una alimentación inadecuada o el sobrepeso afectan directamente a la salud de nuestras arterias. De igual manera, el tabaquismo empeora, y mucho, la situación. Fumar no solo aumenta las posibilidades de tener problemas de tensión, sino que, para un hipertenso, duplica el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares como, por ejemplo, un infarto.

El sobrepeso es otra de las causas directas de la hipertensión. Si bien es cierto que no se conoce el mecanismo que relaciona peso y presión, adelgazar reduce la presión arterial y disminuye el riesgo cardiovascular y de diabetes. En el caso de sufrir sobrepeso, existen hábitos beneficiosos para reducir peso de forma saludable. No hay que olvidar que cada pérdida de 5 kilos de exceso puede reducir la tensión arterial sistólica entre 2 y 10 puntos.

Colesterol e hipertensión son dos buenos amigos que suelen ir de la mano. El motivo no es otro que el compartir los mismos factores de riesgo: la vida sedentaria y una alimentación deficiente.

Con este panorama, queda muy claro que cuidar la alimentación y realizar algo de ejercicio es vital para cumplir años sin el lastre que suponen estos problemas de salud.

Tanto para prevenir como para estabilizar los niveles, nos podemos apoyar en estos consejos:

• Dejar de fumar y evitar todo tipo de humos.

• Mínimo de alcohol. Las bebidas alcohólicas, independientemente de su graduación, suben la tensión. Por eso, lo más recomendable es reducirlas al mínimo.

• Controlar la alimentación. Y no solo para evitar superar las recomendaciones de sal, también para lograr un peso saludable. El sobrepeso es uno de los grandes enemigos del corazón, por lo que hacer ejercicio y mantener un peso saludable ayuda en todos los sentidos.

¿Sabías que, aunque durante años se ha culpado a la sal de los problemas de hipertensión, según los últimos estudios la sal no es ni el único ni el mayor culpable de la tensión arterial alta?

De hecho, en varios ensayos se ha podido comprobar cómo el sodio no afecta de la misma forma a todas las personas. Aun así, las personas hipertensas sí deben tener una precaución extra a la hora de calcular la sal que ingieren en un día. Excepto en casos puntuales, los médicos recomiendan rebajar los niveles de sal, pero tampoco es necesario retirarla por completo.

Así que, desde Maskom Supermercados te dejamos estos consejos:

  • No poner el salero en la mesa
  • Aprender a sustituir la sal por otros aliños o especias
  • Evitar todo tipo de alimentos precocinados o productos en los que no podemos controlar la cantidad de sus ingredientes es una buena base.