Con la vuelta al cole, resulta fundamental que los peques se vayan a la cama pronto para que puedan descansar, y recuperar energía de cara al día siguiente. No obstante, a veces la hora de acostarlos se convierte en una peculiar batalla y, por eso, desde Maskom Supermercados queremos ofrecerte algunos trucos y consejos para ayudarte:
- Calcular qué hora es la adecuada para irse a la cama y comunicárselo. Además, tratar de que todos los días se acueste a esa misma hora.
- Repetir una rutina diaria a esa hora. Por ejemplo: Ducha, cenar, cuento y dormir. Adapta este ritual a lo que mejor veas que funciona con tus hijos.
- Ejercicio durante el día. Si tus peques hacen ejercicio seguramente tendrán más ganas de irse a la cama pues se encontrarán cansados y sin energía. Así que es importante que durante el día jueguen al aire libre, corran, hagan natación u otro deporte.
- Videojuegos o pantallas por la noche prohibidos. Y es que estos no hacen más que excitar su actividad cerebral. Lo ideal es que opten por la lectura como última actividad del día, ya que contribuye a la relajación de los peques.
- Azúcar mejor no. Igual que el punto anterior, el azúcar antes de dormir tiene un efecto excitante así que trata de que no consuma demasiado azúcar después del mediodía.
- Luz tenue. Es importante mantener un grado de oscuridad para adquirir el sueño. Así que asegúrate de que echas la persiana o una cortina opaca. Eso sí, probablemente tu hijo prefiera que dejes alguna luz tenue encendida durante la noche.
Y con todo, recuerda que las horas de descanso afectan al desarrollo físico, emocional, cognitivo y social de tus hijos. Los trastornos de sueño pueden originar otros problemas médicos y de desarrollo, incluso psicológicos en los peques. Así que tenlo en cuenta e intenta introducir estas rutinas en casa para mantener un horario óptimo de sueño.